La Unidad Piquetera volverá a tomar las calles porteñas en reclamo por más alimentos y ante la posibilidad que el gobierno de Alberto Fernández “desenganche” al programa Potenciar Trabajo del Salario Mínimo Vital y Móvil, con el afán de achicar el gasto social, un hecho que hasta ahora ningún funcionario hizo público, pero que circula en los pasillos del la casa Rosada, la CGT y el ministerio de Desarrollo Social.
Mañana los delegados de las principales organizaciones de izquierda realizarán un plenario para resolver si la marcha y posible acampe sobre la Avenida 9 de Julio, frente al histórico edificio con las imágenes de Eva Duarte de Perón, se realizará el próximo martes o miércoles.
Pero eso no es todo, la semana próxima, los dirigentes de la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), alineados en el Frente de Todos, realizarán asambleas en todo el país y una central en el obelisco.
“Somos optimistas... Pero pensamos que la situación social se puede poner muy caliente”, analiza uno de los referentes de la UTEP ante este medio y desgrana: “Hay varios temas para abordar, no está claro que el 5 de diciembre los compañeros cobren el Potenciar Trabajo. Para el aguinaldo hasta ayer no estaban los fondos y tampoco está claro si se va a desenganchar los programas sociales del Salario Mínimo Vital y Móvil. Por estas razones, la UTEP está en alerta y Movilización”.
Otro dirigente dijo: “Desde el Movimiento Evita no vamos a ser cómplices del ajuste”. La posible movilización de las organizaciones oficialistas es un alerta naranja que se observa en el panel de control de la Casa Rosada.
La UTEP está conformada, entre otras organizaciones, por el Movimiento Evita, Somos Barrios de Pie, el Frente Popular Darío Santillán, Somos América y el Movimiento de Trabajadores Excluidos, entre otras.
Las versiones sobre el desacople del Potenciar Trabajo del salario mínimo comenzó a circular después que el fiscal Guillermo Marijuán, basándonos en un informe de la AFIP, solicitado por el ministerio de Desarrollo Social, detectara el posible cobro irregular de más de 250.000 beneficiarios de ese programa y solicitara, el 14 de noviembre pasado, la suspensión y el reempadronamiento de los planes sociales otorgados irregularmente.
Hasta ahora los titulares del Potenciar Trabajo perciben, por parte del Estado, el 50% del Salario Mínimo Vital y Móvil que en marzo será de $69.500, es decir $34.750 por cuatro horas de trabajo realizadas en una Unidad de Gestión -como cooperativas- que en gran parte dependen de las mismas organizaciones sociales.
Según Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, en la última reunión que mantuvieron esta semana con las segundas líneas del ministerio de Desarrollo Social, Pablo Pais, el titular de la Unidad Ejecutora de Inclusión Socio-productiva, les aseguró que la ministra Tolosa Paz “no está de acuerdo con un ajuste en los planes sociales como el Potenciar Trabajo”.
En el encuentro, el funcionario les habría comentado a los dirigentes piqueteros que esa no es una iniciativa de la ministra de Trabajo, Raquel “Kelly” Olmos, ni del ministro de Economía, Sergio Massa, ni del Gobierno.
Para el referente de la Unidad Piquetera “el pedido surgió por parte de las patronales en coincidencia con el ajuste exigido al Gobierno por parte del FMI”.
La explicación sería la siguiente: “Los planes antes no estaban enganchados con el salario mínimo, lo cual hacía que, vía inflación, se fueran rediciendo y perdiendo el poder adquisitivo del Potenciar Trabajo”.
El dirigente de izquierda pone como ejemplo el plan Barrios Bonaerenses que “se fue deteriorando al punto de desaparecer al no tener ningún mecanismo de actualización”.
Según Belliboni, para “patronales del interior del país, el sueldo del Potenciar, aunque parezca mentira, es altísimo si se compara con los sueldos de las cosechas, que son muy bajos entonces compite con lo que quieren pagar las empresas”.
En el ministerio de Trabajo no confirman que las empresas hayan solicitado el desenganche, pero entonces ¿de dónde salió el pedido? Hay versiones que señalan a las centrales obreras, entre ella la CGT y la CTA.
Los gremios rechazaron esa información. “La CGT es solidaria con la gente que está encuadrada en los movimientos sociales”, señaló Andrés Rodríguez, titular de UPCN.
“La CGT en ningún momento pidió el desenganche del salario mínimo con respecto al Potenciar Trabajo. Todo lo contrario, es algo solidario que, en este momento tan difícil de la obtención de empleo, compatriotas que realizan tareas también tengan algún ingreso, aunque sea mínimo”, le dijo Rodríguez al portal Gestión Sindical.
El integrante de la denominada “mesa chica” de la CGT recordó: “Participé de las conversaciones del Consejo del Salario con la ministra de Trabajo -Raquel Olmos- y en ningún momento se planteó esta cuestión. Si es un problema del Poder Ejecutivo en materia de redistribución de ingresos es otra cosa”, sostuvo.
“Los refuerzos alimentarios para los comedores y merenderos populares no llegan, tampoco las máquinas y herramientas para los proyectos productivos, como nos prometió la ministra Tolosa Paz. A eso se suma el proyecto que impulsan las patronales de ‘desenganchar’ el Potenciar Trabajo del salario mínimo, según nos dijo Pais en la última reunión, por eso vamos a salir a la calle, como lo hacemos cada vez que incumplen con sus promesas”, le dijo Belliboni, a este medio.
Los dirigentes piqueteros también solicitaron al ministerio de Desarrollo Social “el aguinaldo de fin de año”, tal como lo viene cobrando los últimos años.
Por último, Belliboni se quejó por la auditoría electrónica” que como anticipó este medio Tolosa Paz impuso sobre los más de 1.300.000 beneficiarios del Potenciar Trabajo y que supone la baja automática de los que no completen el cuestionario hasta el 6 de enero. El piquetero asegura que miles de titulares del programa social “no tienen conectividad”.
La ministra decidió dar por terminada la auditoría presencial que había impulsado su antecesor Juan Zabaleta por la virtual ya que la metodología anterior, en palabras de la funcionaria “era muy lenta e incompleta”.
Las presuntas irregularidades detectadas en el cobro de Potenciar Trabajo por la AFIP y las causas abiertas por ese hecho, pone en dudas el cobre de los haberes del mes de noviembre y por eso, los dirigentes de la UTEP, y también los piqueteros, están en alerta y movilización.