El debate sobre el traspaso de las líneas de colectivos, con una quita de subsidios que obligará a cada distrito a financiar el transporte local, agravó la tensión entre el gobierno nacional y la administración de la Provincia de Buenos Aires.
Una de las voces más críticas ha sido la del gobernador Axel Kicillof, quien expresó su preocupación por las consecuencias que este traspaso podría tener en las tarifas de los colectivos, y suele calificar a este gobierno como “el más unitario de la historia” ; de hecho, más de una vez advirtió que los libertarios llevan al país hacia la “disolución nacional”.
En ese contexto, el portavoz presidencial Manuel Adorni ofreció una rueda de prensa desde la Casa Rosada y fue tajante al afirmar que la decisión de transferir las líneas de colectivos ya está tomada y que, aunque el tema es complejo, los detalles finales del traspaso se están ultimando y pronto se harán oficiales próximamente. Y al ser consultado sobre las palabras del gobernador bonaerense, comenzó con una chicana. ”¿Qué dijo? Me bloqueo con Kicillof”.
Luego de esa repregunta cargada de acidez, el vocero arremetió con dureza: “Estamos acostumbrados a que diga absolutamente cualquier cosa, lo que diga no tiene demasiada relevancia después de haber sido parte de la destrucción de la Argentina”.
“Si (Kicillof) opina que estamos al borde de la disolución, está bien… Ante un delirio es difícil tener una respuesta coherente”, remató el portavoz presidencial
En cuanto a las quejas de otros mandatarios -entre ellos el alcalde porteño Jorge Macri-, el portavoz dobló la apuesta y enfatizó que la administración de Javier Milei “sólo se hará cargo de las líneas de transporte de carácter nacional”, mientras que “las provincias y la CABA deberán asumir su responsabilidad sobre las líneas locales. “El gobierno nacional se hará cargo de lo que le corresponde, no de lo que no le corresponde”, remarcó.
La discusión por el ajuste
Más allá de la disputa particular con Kicillof, el funcionario del gobierno nacional se refirió al debate (y los reclamos) sobre los aumentos de las tarifas, del combustible y de los alimentos que impactan en el bolsillo de la gente.
“Nosotros siempre describimos lo que iba a pasar, incluso antes de que sucediera. Entendemos que la gente hizo y está haciendo un esfuerzo enorme y entendemos que sigue apoyando (a Milei) porque ve lo que estamos haciendo y entiende que el camino anterior (la administración kirchnerista) era revolcarnos al vacío”, analizó Adorni en el salón de conferencias de Casa Rosada.
Para cerrar su idea, apuntó: “La gente entiende que corregir el desastre que han hecho durante décadas no se puede lograr haciendo lo mismo que nos llevó a la catástrofe. Estamos convencidos de que el apoyo que tenemos es por eso, nadie salta sin agacharse... Sabíamos que para salir adelante teníamos que corregir lo que estamos corrigiendo”.
Conflicto gremial
El paro salvaje que realizaron los sindicatos de aeronáuticos provocó demoras y cancelaciones de vuelos que afectaron a miles de pasajeros. Esto provocó también una respuesta del gobierno de Milei, que anunció multas y sanciones a los que se plegaron al reclamo.
“Los gremios aeronáuticos perjudicaron a los pasajeros con un paro encubierto tras modificar los horarios de sus asambleas informativas”, cuestionó Adorni esta mañana, y agregó que la protesta afectó a 10 vuelos de la empresa Jetsmart, 10 de FlyBondi y al menos 30 vuelos de Aerolíneas Argentina.
“Se van a aplicar multas y sanciones contra todos los que realizaron estas medidas abusivas, como ya se hizo con más de 200 empleados. Aerolíneas Argentina tiene como prioridad sostener un servicio de calidad, seguro y confiable. Por el paro de hoy, en Intercargo habrá descuentos a 108 trabajadores, por un total de 1.4 millones de pesos”, adelantó el funcionario.