“La denuncia no fue consensuada. Sergio no estaba de acuerdo con eso”, fue la sentencia que salió del entorno de Sergio Massa luego de que Alberto Fernández denunciara penalmente a Javier Milei por incentivar a la gente a desarmar los plazos fijos en pesos y comprar dólares, lo que en el oficialismo entienden que fue determinante para que se concrete la corrida cambiaria de ayer.
El jefe de Estado presentó una denuncia en Comodoro Py por intimidación pública. “La población se atemorizó respecto de la real posibilidad de que nuestra moneda, el peso, no mantenga su valor y continúe siendo el signo monetario del país”, sostiene el escrito según publicó Infobae.
El ministro de Economía no estaba al tanto de la denuncia que efectuó el Presidente, lo que expone una importante falta de comunicación entre los dos en medio de un clima de máxima tensión por el aumento del dólar paralelo, que rompió la barrera de los $1.000. “No le gustó su accionar”, explicaron en el búnker de UP.
Lo extraño no fue solo la falta de diálogo con el titular del Palacio de Hacienda. Tampoco estaban al tanto en el equipo de comunicación de la presidencia, con base en la Casa Rosada. La descoordinación fue total.
“Le vamos a ganar a Milei en las urnas, no en tribunales”, aseguraron cerca de Massa, que nunca estuvo de cuerdo con avanzar judicialmente sobre Milei. Por eso en su entorno sostienen que el Presidente “se cortó solo” en la decisión y no la coordinó con el candidato presidencial.
Las últimas 48 horas del oficialismo fueron muy complejas. El dólar blue se disparó y Massa salió a cruzar a los “cuatro o cinco vivos” que fomentaron la corrida, además de tildar de “irresponsable” al líder de La Libertad Avanza, por asegurar que “el peso no vale ni excremento” y que el mejor camino “es ir al dólar”, justo en un momento donde la tensión cambiaria es casi permanente y al Gobierno le faltan dólares para intervenir en el mercado.
El malestar del candidato peronista está radicado en que entienden que esa no es la forma de avanzar frente a la corrida cambiaria, sino con medidas concretas, como las que se tomaron hoy cuando se efectuaron operativos de la Policía Federal y la Aduana, que terminaron con la detención de un grupo de ciudadanos extranjeros con 800 mil dólares en su poder.
El ministro de Economía avanzó contra las cuevas y los operadores financieros que ve detrás de la corrida que este martes terminó con un nuevo alza del dólar paralelo y generó un clima de inestabilidad a pocos días de la elección general. Ayer ya había prometido que su objetivo era “meter presos a los responsables”, pero nunca hizo referencia a una posible denuncia penal.
Luego de ser denunciado, Milei convocó a una conferencia de prensa junto al candidato a jefe de Gobierno porteño Ramiro Marra. Allí reivindicó su postura respecto al peso argentino y afirmó: “El kirchnerismo está intentando ensuciar el proceso electoral o incluso proscribir a la fuerza más votada en las elecciones de agosto”.
En esa línea, agregó: “Saben que estamos a pocos puntos de ganar en las elecciones de octubre y terminar con su gobierno de delincuentes para siempre. No vamos a aceptar bajo ningún punto de vista que el Gobierno pretenda desligarse de la responsabilidad que tiene del descalabro económico que están generando con las medidas que ellos mismos tomaron”.
Massa postergó el viaje que tenía previsto para este miércoles a Mendoza para quedarse en el ministerio monitoreando el mercado cambiario. Puso el foco absolutamente en la gestión y se despojó del traje del candidato. Por eso también molesta tanto el accionar de Fernández. La campaña se puso en pausa por el tema de la corrida cambiaria y el Presidente se movió por fuera de la estrategia política.
“No le vamos a responder a Milei. Vamos a seguir con la campaña de propuestas y con la gestión. Solo eso”, advirtieron en el búnker oficialista. Seguirán polarizando, pero en base a los temas de la agenda. No quieren un tema judicial en el medio. Aunque Alberto Fernández piense lo contrario.