En una nueva jornada de protestas, los trabajadores del subte vuelven a paralizar el servicio con el objetivo de reforzar sus reclamos. De esta manera, las líneas A y H se encuentran interrumpidas. La medida de fuerza, que empezó a las 14 y se extenderá hasta las 16, es en reclamo de dos francos semanales para así reducir la exposición al asbesto.
Sin embargo no es la única iniciativa que tomarán los metrodelegados, ya que liberaron molinetes de 13 a 14 y también lo harán de 16 a 16.30 horas en las estaciones cabeceras de cada línea. La A en San Pedrito y Plaza de Mayo, y la H en Hospitales y Facultad de Derecho.
Los trabajadores resaltan que sus acciones, dictadas por la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (Agtsyp), son tomadas en forma de ‘autodefensa’. Así lo expusieron en un comunicado difundido que afirmaba que las mismas se hacen debido a la negativa por parte de Emova y Sbase a conceder sus reclamos de reducción de la jornada laboral a 30 horas semanales para así tener dos francos y reducir su exposición al asbesto.
“Somos conscientes de que el asbesto mata, ya se ha llevado la vida de tres trabajadores del subte y ha afectado a otros 84 trabajadores por el momento, entre ellos seis con cáncer y una pasajera. Exigimos un resguardo para nuestra salud con mejores condiciones de vida. Lamentamos las molestias que esto pueda ocasionar al público usuario”, agregaron.
El mineral al que hacen referencia los metrodelegados está prohibido por ley. Tampoco está permitida su compra, venta, uso, manipulación y exposición por las consecuencias fatales para el cuerpo humano. De hecho, los metrodelegados indicaron en un comunicado anterior que “es un material cancerígeno prohibido en Argentina desde el año 2003″.
En la vereda opuesta, la empresa Emovia manifestó su rechazo a la posición del gremio. Al mismo tiempo enfatizó que no existe riesgo alguno para la salud de los trabajadores.
Al respecto, aclaró que “se realizan permanentes mediciones de calidad de aire en todos los ámbitos del Subte cuyos registros arrojan resultados muy por debajo de los niveles admitidos en las normas y asimismo iguales o inferiores a los que se detectan en la vía pública”. Emova garantizó que no existe una declaración de insalubridad alguna en los subtes, así como también ratificó su compromiso con su plan de desabestización.
“Se contrataron empresas especializadas y certificadas específicamente para trabajos con asbestos y se ha avanzado desasbestizando las formaciones tanto en el Taller Rancagua (Línea B) como en Lacarra (Línea E). Estas empresas operan bajo la supervisión de la Agencia de Protección Ambiental de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y de la Subsecretaría de Trabajo”, precisó la compañía a través de un comunicado.
La medida de fuerza se suma a la paralización de las líneas B,C, D y H del lunes y martes pasado. De esta manera, ya son seis los paros en el servicio en el plazo de dos semanas.
Días atrás, una medida similar se implementó en las líneas D y E. La interrupción del servicio inició a las 14 y finalizó a las 16 horas, como estaba previsto de acuerdo con el comunicado difundido por los metrodelegados.
A diferencia de esta oportunidad, en aquel entonces se decidió la apertura de molinetes antes del inicio del paro en las estaciones Congreso de Tucumán y Catedral de la Línea D; Plaza de los Virreyes, Eva Perón e Independencia de la Línea E.
En las oportunidades anteriores se habían visto afectadas las líneas B y C durante el horario de la tarde.