Donald Trump confirmó este miércoles que conversó con su par ruso, Vladimir Putin, sobre la guerra en Ucrania y el acuerdo nuclear de Estados Unidos con Irán, dos de las prioridades de la agenda internacional de la Administración republicana.
Trump precisó que la llamada duró cerca de una hora y 15 minutos y si bien fue “buena”, reconoció que “no va a conducir a una paz inmediata” con Ucrania.
Precisamente, el líder del Kremlin se refirió a la Operación Telaraña, el último golpe importante de Kiev sobre sus aviones, y aseguró “con mucha firmeza, que tendrá que responder” a él.
Trump, por su parte, también abordó con su homólogo sus ataques sobre instalaciones civiles en Ucrania, que han dejado decenas de inocentes muertos.
Sobre Irán, el estadounidense advirtió que “se está acabando el tiempo” para que el régimen persa “tome una decisión sobre las armas nucleares”, algo que, insiste, el país no puede poseer y en lo que Putin coincidió.
Asimismo, Trump sumó que “Putin sugirió que participará en las conversaciones con Irán y que tal vez podría ser útil para llegar rápidamente a una conclusión”.
Por su parte, el Kremlin también señaló que el intercambio fue “positivo y muy productivo” y aseguró que ambos mandatarios “confirmaron su deseo de mantener un contacto permanente”.
Asimismo, el asesor diplomático de Putin, Yuri Ushakov, sumó que Trump confirmó que Ucrania no había notificado a Estados Unidos previo a su ataque del domingo.
NEGOCIACIONES CON IRÁN
Los esfuerzos de Estados Unidos no se centran, sin embargo, solo en la guerra en Ucrania. Otra de las prioridades de la Casa Blanca en estos momentos es alcanzar un acuerdo nuclear con Irán que permita limitar su programa atómico y lo aleje de las capacidades para hacerse con un arma de este tipo.
Las partes han mantenido ya cinco encuentros indirectos en los que cada bando planteó sus condiciones para un pacto, que de momento tendría su principal centro de conflicto en el enriquecimiento de uranio de la nación persa.
Durante el fin de semana, Estados Unidos envió a sus homólogos una propuesta para avanzar hacia un acuerdo, que Teherán dijo con cautela que revisaría.
Sin embargo, Trump manifestó el lunes a través de su red social Truth Social que bajo un eventual nuevo acuerdo nuclear, no se permitirá ningún tipo de enriquecimiento de uranio por parte de Irán, lo que alejaría las posibilidades de un entendimiento.
“Bajo nuestro potencial Acuerdo, ¡NO PERMITIREMOS NINGÚN ENRIQUECIMIENTO DE URANIO!”, escribió, antes de responsabilizar a su predecesor, Joe Biden, por la situación actual, argumentando que debió haber impedido que la nación continuara con su programa de enriquecimiento.
Tras estas declaraciones, el ayatollah Alí Khamenei criticó la propuesta inicial de Estados Unidos, describiéndola como “100% en contra de la idea de ‘nosotros podemos’”, en referencia a un lema del gobierno iraní, y acusó a la Casa Blanca de buscar el desmantelamiento total de la industria nuclear iraní.
“Si no tenemos enriquecimiento, entonces tendríamos que extender nuestra mano (mendigando) a Estados Unidos (...) Los líderes estadounidenses descorteses e insolentes siguen repitiendo esta demanda con diferentes formulaciones”, aseguró.