Seis turistas de Argentina, Brasil, Chile y Francia fueron detenidos por ingresar a zonas prohibidas de la ciudadela inca de Machu Picchu y dañar el famoso Templo del Sol, donde además defecaron. "Los seis turistas están detenidos y son investigados por el ministerio Público por el presunto delito contra el patrimonio cultural", informó el coronel Wilbert Leyva, jefe de la región policial del Cusco.
El grupo de viajeros -cuatro varones y dos mujeres- ingresó ilegalmente a la ciudadela la noche del sábado último. Al momento de ser detenidos, durante la madrugada, estaban en la zona del mirador del "Templo del Sol" y los agentes les atribuyeron haber provocado la caída de una piedra de uno de los muros de la ciudadela, levantada en lo alto de una montaña.
Asimismo, en la zona, la policía encontró restos fecales, por lo que presume que alguno de los detenidos hizo sus necesidades en esa área. La Dirección de Cultura de Cusco reportó la fractura de "un elemento lítico" desprendido de un muro y que cayó de una altura de 6 metros aproximadamente, lo que provocó una hendidura en el piso.
La ley peruana sanciona a quienes dañan el patrimonio cultural con penas de prisión de al menos cuatro años. Machu Picchu se encuentra sobre la cima de una montaña de 2.400 metros de altura. Es el principal destino turístico del país y cada día es visitado por miles de personas, que acceden al lugar por tren desde la ciudad del Cusco. Unesco la declaró Patrimonio de la Humanidad en 1983, y en 2007 fue elegida como una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo en una encuesta mundial en internet.