A partir de la confirmación de la baja de retenciones y la suba de reintegros a bienes finales e insumos intermedios industriales se generó un importante impulso en al menos una decena de sectores que ya están analizando la posibilidad de acceder a nuevos mercados. A su vez, se aceleraron las gestiones de quienes no fueron incluidos dentro de la medida y consideran que tienen potencial exportador. Alimentos industrializados, autos y algunos rubros metalúrgicos piden que se revisen sus posiciones arancelarias. El Gobierno no descarta nuevos anuncios en los próximos días.
La oficialización de la medida terminó marcando una reducción del 4,07% a 2,34% en los derechos de exportación industriales implicados. Se trata de 5121 posiciones arancelarias que fueron modificadas y desde algunos sectores marcan la necesidad de ampliar ese listado. “La mayoría de los alimentos industrializados quedaron afuera y muchos de ellos tienen gran potencial para ganar nuevos mercados”, consignaron desde la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios.
Los principales referentes de la Cámara de la Industria Aceitera dijeron que la reducción del 33% al 30% es insuficiente, aunque destacaron la vuelta de los diferenciales dentro de la cadena sojera como un dato positivo. De todas maneras esa discusión continúa en el marco del diálogo que los ministros Martín Guzmán, Matías Kulfas, Solá y Luis Basterra tienen con el Consejo Agroindustrial. De hecho, está prevista una reducción de los derechos de exportación a la carne, que podrían llegar a descender del 9% al 5% en los próximos días.
“La medida va en el sentido correcto pero hay muchos sectores que se quedaron afuera, como varios productos de la metalmecánica”, dijo a Ámbito Martín Rappallini, titular de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos. A su vez, recalcó que “sería bueno que este beneficio se amplíe, hay negociaciones que siguen abiertas”. En el caso del sector automotriz hubo una baja al 0% de bienes finales pero que solo rige para las exportaciones automotrices incrementales extra Mercosur, para lo cual se toman como base los últimos 12 meses anteriores a partir de la entrada en vigencia del decreto. “Sería una importante señal que se analice incorporarnos al beneficio de manera completa dada la importancia para la economía”, dijo Daniel Herrero presidente de la Asociación de Fábricas de Automotores.
Una situación similar registraron en el sector químico, donde la reducción se aplicó a 361 de los 2.040 productos exportables. Por este motivo la baja de retenciones solo implicó una mejora del 0,12% en la situación impositiva. Los industriales siguen marcando que la pronunciada brecha cambiaria trae muchos inconvenientes a la hora de la exportación. Destacan que la baja de retenciones es un buen instrumento para acortar esa diferencia a la hora de concretar las ventas al exterior porque tampoco creen que el camino sea una nueva devaluación. De todas maneras, recalcan que la efectividad del nuevo esquema dependerá de la estabilidad macroeconómica.
El Gobierno considera que a partir de estos anuncios se retoma el sendero de la diversificación y complejización de la canasta exportable y esperan que la medida tenga una repercusión positiva a corto plazo en las inversiones. Incluso, en su exposición de esta semana en la Cámara de Diputados, el ministro de Desarrollo Productivo no descartó la posibilidad de que haya nuevas modificaciones en el esquema de reintegros y retenciones.