Pasó un nuevo fin de semana para Franco Colapinto en la Fórmula 1. Y, por primera vez, el argentino mostró que los rookies también se equivocan. Luego de actuaciones que dejaron a todos con la boca abierta (especialmente en Bakú y Austin) y que hasta derivaron en que varios equipos (entre ellos Res Bull) escribieran un mensaje para contactar a James Vowles, pope de Williams, con el fin de preguntar por sus servicios, el pilarense vivió un fin de semana para el olvido en materia deportiva: se pegó dos veces en un día, destrozó su FW46 y debió abandonar antes de la mitad del GP de San Pablo.
“Sabíamos que en algún momento podía pasar. Era su primera carrera bajo la lluvia. Una lástima pero podía suceder”, se escuchó en la zona de hospitalidad del conjunto con sede en Grove.
No hay que dejar de olvidar que hasta hace un año estaba compitiendo en Fórmula 3 y solo tuvo diez fechas en la Fórmula 2. Fue un cambio gigante en todo sentido: a nivel competitivo por la exigencia que demanda la categoría reina, mental por la cantidad de actividades que se le sumaron (prensa, rumores, gente que se te acerca, eventos oficiales, popularidad, etc), y emocional por la necesidad de levantarse una y otra vez de manera rápida. De hecho, este fin de semana se enteró de la muerte de su abuelo paterno, Leónidas, y debió salir a la pista como si nada hubiese sucedido. Salvo su hermana, no hubo otro familiar cercano en su box.
Lo cierto es que Colapinto ahora tendrá tiempo para ponerle paños fríos a la situación, analizar lo vivido y continuar para adelante a encarar lo que viene. A la espera de la resolución de su futuro, del que no habrá demasiadas novedades en el corto plazo según confirmó Olé en Brasil tras la charla con gente de su entorno, el volante no tenía confirmado si regresaría unos días al país para estar con los suyos (parecía difícil por una cuestión de plazos) o si volvería con el equipo a Europa -a España, más precisamente donde hace base- con el objetivo de desconectarse un poco antes de subirse al simulador para preparar las últimas tres carreras del año.
De manera consecutiva y con todo para terminar de ganarse su lugar en la parrilla de 2025, Franco llegará el 20 o 21 de este mes a Las Vegas, donde encarará la 22ª fecha de la temporada, la séptima carrera en su trayectoria y el tercer callejero. Luego, se subirá a otro avión para movilizarse desde Estados Unidos hasta Oriente Medio. Allí, conocerá las pistas de Qatar y Abu Dhabi. Y antes de esa jornada que bajará el telón de la Fórmula 2024, se espera tener novedades del próximo paso de Colapinto, según detalló Vowles en una conferencia a la que asistió con otros tres medios nacionales.
Es hora de recoger el mazo y volver a repartir, porque el camino es largo, sigue y no da lugar a las dudas.