Edinson Cavani se sumó este viernes a los trabajos en la ciudad deportiva de Paterna, en donde ya comenzó con la pretemporada con el Valencia. Es decir, el delantero uruguayo de 36 años volvió a España y se reintegró a su equipo. Aunque por lo visto, es solamente por ahora... ¿Qué es lo que falta que se convierta en refuerzo de Boca?
Todas las partes parecieran coincidir en que el futuro de Cavani no está en Valencia. El club, por un lado, porque tiene la intención de no contar más con un jugador que le representa mucho dinero y que por el momento no estuvo a la altura dentro del campo (siete goles en 28 partidos); y el propio jugador, por el otro, ya que tampoco quiere seguir allí. Aunque acá empieza el desglose de la situación...
La postura que toma Valencia que beneficia la llegada de Cavani a Boca
Valencia está dispuesto a abrirle las puertas a Cavani y darle libertad de acción y de elección, siempre y cuando el 9 le perdone al club el año de contrato que le queda y que se vence en junio de 2024. Es decir, básicamente rescindir el contrato e irse sin un euro.
"El plan del club pasa por ahorrarse la alta ficha del futbolista y salir al mercado en busca de otro 9 que se ajuste al perfil que quiere el Pipo. El club, de hecho, hace semanas que peina el mercado de delanteros en busca de sustitutos. El Valencia no tiene prisa y espera al mercado, consciente también de que cuanto antes se resuelva el culebrón de Cavani más posibilidades tendrá la dirección deportiva de llegar a las primeras opciones", explica el medio Súperdeportivo, de los más importantes de Valencia, y deja claro que el 9 hace rato dejó de ser prioridad para el DT Rubén Baraja.
Y por su lado, el jugador, que no tendría problemas en seguir en Valencia en este rol con mucho menos protagonismo, está dispuesto a irse en la medida que aparezca una propuesta seductora deportivamente, que lo enamore y que también se adapte a las condiciones de vida que pretende su familia. Ahí entra Boca, que en principio cuadraría perfecto con las pretensiones del Matador.
El deseo de Riquelme con Cavani y el avance en las negociaciones
Juan Román Riquelme quiere -nuevamente- a Cavani. Es la tercera vez que lo busca desde que asumió como dirigente. Por eso volvió a hablar con su entorno en Buenos Aires y también con él cuando estuvo de descanso en Salto, su ciudad. De hecho, fue el delantero el que abrió el diálogo esta vez, actitud que cayó muy bien en el Consejo.
Las negociaciones van bien, las partes se acercaron: lo económico sería menos complejo que otras veces, ya que Valencia no se opondría ni pediría nada a cambio (siempre que Boca se haga cargo íntegramente del elevado salario) y el Consejo de Román sólo tendría que acordar el contrato con el 9.
Eso sí, después también habrá que prestar especial atención a la hora de cerrar los números finos del contrato, la parte impositiva que muchas veces ocasiona problemas, la suba del dólar en un país inestable como la Argentina y algunos factores más.
Y Cavani, que ya avisó que no volverá a jugar en su país, pese al interés de Nacional y también de Peñarol, y que ya rechazó ofertas millonarias de Arabia Saudita, quiere jugar en Boca. Le seduce mucho la Libertadores, también el sueño de jugar en la Bombonera y el desafío de vestir una de las camisetas más grandes del mundo.
En estas horas hubo avances sustanciales para terminar de darle forma a una incorporación que, se sabe, tiene esos recaudos ya marcados de cómo terminó la historia en las anteriores ocasiones... Aunque esta vez, desde el club ven otra predisposición. Y por lo visto, pareciera que cada vez falta menos para que Cavani sea refuerzo de Boca.