Pocas horas después de anunciar el pago a los bonistas, Axel Kicillof dispuso postergar un aumento que les correspondía a los docentes debido a “la situación financiera sumamente compleja de la Provincia”. El año pasado, la ex gobernadora María Eugenia Vidal cerró la paritaria con los gremios docentes después de ofrecerles una cláusula gatillo trimestral para todo el año. Es decir, aumentos cada tres meses de acuerdo a la inflación registrada por el INDEC. El viernes los docentes cobrarán sus salarios de enero con un aumento del 11,7 por ciento. Sin embargo, ese aumento que contempla las cuotas del último trimestre, dejará al margen una suba vinculada al aguinaldo de diciembre.
Los índices de precios se publican a mes vencido. La inflación de diciembre se conoció a mediados de enero y, por eso, recién ahora deberían otorgar los aumentos del último trimestre del año. Ese incremento que se postergó, según la oposición, representa unos 2.950 pesos para un maestro de grado con diez años de antigüedad o 4.115 pesos para un director de primaria. Después de comunicarles la decisión a los dirigentes sindicales, el gobierno bonaerense emitió un breve comunicado. “El gobierno de la provincia de Buenos Aires confirma que se respetará lo acordado en la paritaria docente 2019. La provincia comunicará a los gremios docentes el mecanismo para el pago de la suma que quedó remanente por la diferencia del mes de diciembre último, que comenzará a saldarse en el mes de marzo”, señala.
“Como es de público conocimiento, la situación financiera de la Provincia es sumamente compleja. Pese a estas dificultades, reafirmamos nuestro compromiso con las trabajadoras y los trabajadores bonaerenses. Seguimos trabajando para poner a la provincia de pie”, cierra el texto. Según supo Infobae de fuentes sindicales, la administración bonaerense les prometió que el aumento demorado se depositará en un pago en marzo. Después de ser informados, el Frente de Unidad Docente bonaerense (FUDB) no se proclamó por sus canales oficiales al respecto. Donde sí hubo repercusiones fue en la oposición, que le reprochó a Kicillof el trato diferenciado que le dio a bonistas y docentes.
“Ayer nos enteramos que a los fondos le pagan de contado y calladitos. Ahora vemos que no es igual con el sueldo de los docentes. ¡Estoy totalmente sorprendido! Me llama la atención el silencio cómplice de los dirigentes sindicales. Una vez más queda demostrado que ni los docentes ni la educación son su preocupación”, señaló Sergio Siciliano, ex secretario de Educación bonaerense y actual diputado provincial. Ante la consulta de este medio, desde el Ministerio de Trabajo sostuvieron que, pese a la postergación, “todo se va a pagar”. “Anda circulando por Twitter voces que dicen que no se va a pagar. No es así. Todo se va a pagar”, afirmaron.